Muchos sueñan con ser poderosos para poder conquistar tierras lejanas, otros prefieren ser Dioses para jugar con la humanidad como si fueran piezas de un gran juego.
Yo en cambio sueño con poder curar tus males, aliviar tus miedos, que nunca sientas soledad y siempre te sientas segura. Sería todo poderoso si lograra que tu sonrisa se dibuje en tu rostro en forma perpetua hasta que la arena del tiempo cubra nuestras existencias.